“Velamos por la profesión médica, por su ejercicio ético en condiciones laborales dignas y justas y por
la salud de los colombianos”.

Artículo 3º. Estatutos. Capítulo I

Órgano asesor y consultivo del Estado en materia de salud pública desde 1935 (Ley 67 de 1935 y Ley 23 de 1981).

Esta es una de las frases que podría resumir la labor de la Dra. Carolina Corcho al frente del Ministerio de Salud y protección social, la pronuncio  en el congreso de la Andi, uno de los miles de espacios en donde se debatió la reforma a la salud buscando su apoyo. Pero el pasado 26 de abril una noticia dejo estupefacto a sectores políticos y de salud, el presidente Gustavo Petro, luego de pedirles protocolariamente a todos sus Ministros la renuncia, acogió entre otras, la renuncia de la Dra. Carolina Corcho.

Nadie lo esperaba, el talante de estratega del Presidente lo hace de cierta forma impredecible. Se podría decir que el único ministro que tenía desde antes de su nombramiento una hoja de  ruta era  la Dra. Corcho, el mandatario, siendo candidato acogió la propuesta de reforma a  la salud  luego de que múltiples sectores reunidos en la cumbre social y política por la reforma a la salud liderados entre otros por la Dra. Corcho, se la presentaran y públicamente la tomo como bandera de Gobierno.

Es así, que la llegada de la Dra. Corcho al Ministerio de Salud no fue una sorpresa, como tampoco fue una sorpresa que ante la insistente presión contra la reforma de los Ministros que representaban a los partidos tradicionales con el que el Presidente estaba haciendo una coalición, este no cediera e incluso llevara a prescindir de los servicios del Ministro de Educación y manteniéndola en su lugar. La matriz mediática bombardeada por medios y políticos tradicionales ha presentado a la reforma como un capricho de la Dra Corcho y todo tipo de calificativo ofensivo le ha llegado por defenderla.

Es así, que la llegada de la Dra. Corcho al Ministerio de Salud no fue una sorpresa, como tampoco fue una sorpresa que ante la insistente presión contra la reforma de los Ministros que representaban a los partidos tradicionales con el que el Presidente estaba haciendo una coalición, este no cediera e incluso llevara a prescindir de los servicios del Ministro de Educación y manteniéndola en su lugar. La matriz mediática bombardeada por medios y políticos tradicionales ha presentado a la reforma como un capricho de la Dra Corcho y todo tipo de calificativo ofensivo le ha llegado por defenderla.

Esa matriz ha ocultado primeramente la procedencia de la reforma y de la exministra. La Dra Corcho es una líder representante del movimiento social y de salud, movimiento que lleva más de 20 años buscando una mejor atención en salud y que en su trasegar ha estado en cientos de tutelas,  sentencias,  proyectos de ley, resoluciones, llegando a estar detrás de la ley estatutaria en Salud con la cual por fin, la Salud se consideraría un derecho autónomo. Este movimiento es el que ha estado en la construcción de la reforma a la salud que pretende de una vez por todas, alejar la visión de que la salud pueda ser tomada como un negocio.

Oculta también esa matriz mediática, que el texto de la reforma ha sido una de las propuestas más colectivas, estudiadas, socializadas y discutidas en los últimos años, no hay reforma más democrática que la que está siendo tramitada en la comisión séptima de la cámara de representantes. El texto,  ha acogido las voces de todos los sectores de la salud, de los médicos, enfermeras, trabajadores, estudiantes, pacientes, empresarios y hasta de caciques políticos tradicionales y aun así lo han catalogado como “la reforma de la corcho”. El afán violento de los intereses privados ha promovido esa visión personalista del proyecto de ley, invisibilizando a todo el sector de la salud que ha participado en la elaboración de dicha reforma, por ello, cada insulto y juicio despiadado contra la exministra ha ocultado su lealtad a los cientos de trabajadores de la salud que han destinado horas de su vida para el diseño de la propuesta de ley.

La postura de la Dra Corcho no es otra sino la de una mujer que ha mantenido presente las voces de enfermeras pesimamente reconocidas, de médicos a los que las EPS les adeudan más de 6 meses de salario, de  pacientes que han tenido que ser atendidos en las peores condiciones, de residentes sobreexplotados, de estudiantes de medicina que buscan en el extranjero especializarse porque no lo pueden hacer en el país y de familiares que han visto morir a sus seres queridos porque las EPS les han negado medicamentos o servicios.  Su compromiso no ha sido a un texto, a un presidente o un plan de gobierno, ha sido sobre todo, a esas voces.

No ha sido extraño escuchar a los presidentes de partidos oponentes a la reforma dirigirse a ella con calificativos como  “intransigente”, “sorda”, “inflexible”, “dogmática” pues tratan  de enmascarar  los intereses que representan en nombre de la defensa de “uno de los mejores sistemas de salud del mundo”. Tratan de tergiversar el actuar bajo  los principios de una mujer que es sensible ante el dolor de los pacientes y ante las injusticias con los trabajadores del sector.

Toda la hostilidad contra la reforma es en última instancia, una reacción ante la posibilidad de que miles de millones de pesos no sigan engordando las arcas de los de siempre. La reforma entre otros alcances, puede lograr romper uno de los negocios más jugosos y despiadados que se han conformado en nuestra historia y ese es el origen de su animadversión.   La Dra. Carolina Corcho, lo sabe, siendo una profesional ha estudiado en profundidad el modelo de salud colombiano, y por ello el primer mandatario es consciente que no es posible pedirle a ella que ceda ante el interés de que se mantengan el manejo de los recursos públicos de la salud en manos de empresas privadas, mucho menos con los resultados que hoy tenemos.

No ha sido intransigencia o que no ha querido escuchar, es que la postura en defensa de los trabajadores, de los médicos, de los pacientes no podía ser otra. El carácter y compromiso de la ex ministra ha blindado la dignidad del sector salud hasta el momento y por ello el primer gobierno de Colombia que se ha propuesto cambios sustanciales, no pudo tener una mejor templaría al frente de la reforma, la Dra. Carolina se va como pocos, con la cabeza bien en alto y su integridad intacta.

 De allí a que los sectores más congruentes de la política del país han salido a aplaudir su labor en el Ministerio, el líder social y congresista Wilson Arias Señala: “Exministra  @carolinacorcho, es usted una heroica y fiel servidora al pueblo. Quienes la conocimos en el movimiento social y luego la vimos transitar a ser Gobierno, tenemos la tranquilidad de que usted no traicionó al pueblo.” Por su parte Cielo Rusinque, Directora de Prosperidad Social señala “No estoy triste, se me metió hace horas una Minsalud en el ojo, mi admiración y reconocimiento por su trabajo. Mi reconocimiento a quienes acompañaron hasta hoy el gobierno.” El congresista Alexander López Maya trina “Gracias Ministra por su esfuerzo incansable y comprometido por hacer de la salud un derecho para todos y todas y no un negocio para algunos. Gracias por su convicción en hacer de Colombia un país más justo y mejor salud. Gracias por poner la salud en el debate público. Gracias @carolinacorcho por jugarte la vida por el país.” Finalmente el congresista y ponente de la reforma Alfredo Mondragón señala “@carolinacorcho usted ha sido la arquitecta y guardiana del mandato popular por la reforma a la salud. Estoy seguro que el presidente @petrogustavo, la ciudadanía y nosotros contamos con su apoyo para seguir defendiendo una reforma que proteja la vida.”

Y así será, su vida ha estado entregada a la justicia y su paso por el ministerio no será su salida de tan trascendente debate, sabemos qué seguirá luchando por los trabajadores, por los pacientes, por los profesionales, por el pueblo humilde. Ha estado en el diseño de la reforma y el país sabe todos sus esfuerzos para que hoy la reforma siga tramitándose en un congreso aun lleno de intereses personales y privados. Sin duda, pasará a la historia como una de las grandes luchadoras por el cambio y miles de niños nacidos, pacientes recuperados y trabajadores con dignidad le agradecerán su férrea defensa por ese modelo de salud que está alumbrando y que  transformara sin duda a toda la sociedad Colombiana.

Camilo Figueroa
Comunicaciones FMC